28.10.08

¿EL JURADO SIEMPRE TIENE LA RAZÓN?

Este fin de semana se ha desarrollado una de las pruebas de montaña con el tramo más largo: 9 kilómetros de subida a Navalmoral que me he quedado con muchísimas ganas de hacer, y que me apunto sin falta para la temporada 2009.

Por lo que cuentan los pilotos, la prueba es especialmente divertida, sobre todo porque supone mucho más tiempo al volante para el piloto, y por tanto mayor disfrute. Además, en esta ocasión había un incentivo añadido: la Peña Los Amarillos otorgaba un premio simbólico, a la pasada más espectacular.
Está claro que algo tan subjetivo como la espectacularidad es muy difícil de medir y de consensuar, y por eso ha traído consigo cierta polémica:

¿Qué criterios utiliza este “jurado” para otorgar el premio? Supongo que la excitación que provoque al público, el riesgo sufrido por el piloto y el forcejeo del coche con el asfalto. Tanto es así, que el premio lo obtuvo un piloto que dio la curva con tal descontrol que se salió de la carretera y de milagro evito un percance mayor.

¿Qué criterios tenemos los pilotos? Para mí una pasada espectacular supone que el piloto consiga cruzar el coche en la curva, controlando la conducción hasta el punto de cuadrarlo sin salir de trazo de asfalto. Aquí se mide la habilidad en la conducción del piloto y el control sobre el vehículo ante sus movimientos bruscos generados por la inercia de la velocidad en la tangente.

Para esto el amo de la carretera es mi buen amigo Lombardía, que siempre nos hace vibrar en cada subida con su Lagarto Verde, un CM con el que da espectáculo del bueno y con el que todos disfrutamos en cada pasada de curva. La diversidad de criterios entre este jurado y la técnica hizo que esta vez se valoraran aspectos ajenos a la calidad en la conducción. No obstante, desde aquí aplaudo como siempre al que para mi es el Rey de la Montaña, el Campeón de Castilla y León: El Tío Lombardo. Disfrutad aquí de la pasada del Lagarto Verde: lo merece… Como siempre, es impresionante!!.

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