SUBIDA A PARACUELLOS DEL JARAMA: FRÍO, TÉCNICA Y DOBLETE!

Con la subida a Paracuellos el Campeonato Madrileño ha terminado y con él mi temporada automovilística, y como resultado: DOBLETE!! Ya habíamos ganado la Clase en el Campeonato Manchego y ahora puedo decir que también en el Madrileño, y en la general, tercero!
No nos podemos quejar de nuestro comienzo en las subidas de Madrid.

La Subida a Paracuellos es un trazado corto, pero bastante rápido y técnico. El día fue muy frío y eso perjudicó creo que a todos los pilotos, porque el asfalto estaba helado y por lo corto del trazado los neumáticos no llegaban a calentar y no agarraban bien. No obstante, Paracuellos me gustó bastante, muchos lugareños asistieron a la carrera, y todo hay que decirlo, la organización fue mejor que cualquiera de las anteriores pruebas del Campeonato Madrileño.

Como siempre, aquí os dejo la cámara interior para que podáis vivir conmigo mi pasión por el motor.

REENCUENTRO CON UN CLIO WILLIAMS

Antes de cumplir los 18, ya sabía conducir, por eso pocas clases de autoescuela me hicieron falta para conseguir el ansiado carné. Mi coche soñado era el Clio Williams, pero mi bolsillo y mi cabeza hicieron que mi primer coche fuera un Clio 1.8: no me disgustaba, pero no era lo que yo quería, por lo que mi corazón venció y acabé vendiendo este Clio con casi un año para cumplir mi sueño.

Renault sólo fabricó 2000uds del Clio Williams, y yo compré el último de ellos que había en España: hasta Córdoba fui a buscarlo por no esperar.Hace unos 7 años las circunstancias me hicieron venderlo con todo el dolor de mi corazón, y desde entonces me he arrepentido de ello.
Casualidades de la vida, ayer estaba en Talleres Milan Sport, revisando el coche de carreras con Pedro, y adivinad qué entró por la puerta: un CLIO WILLIAMS!
El corazón me dio un vuelco, y no pude dejar de hablar con su dueño: me contó lo que le había costado encontrarle, y lo mucho que admiró el mío en la época en la que lo tenía, además de hablarme de todo lo que se comenta en el foro del Clio Williams.
Lo mejor de todo, es que cuando nos despedimos él mismo me ofreció conducirlo de nuevo: salimos a carretera, y volví a vibrar con el que para mí ha sido más que un coche, y que espero algún día poder tener de nuevo.Ahora tengo un Volkswagen Golf TDI-GTI 1.9 150CV, más confort, más extras, pero nada que ver con mi Clio Williams. Es más, aunque en su día lo vendí, su esencia se vino conmigo, y en el motor de mi Golf cualquiera puede leer "Williams"... Y espero que algún día la esencia sea sustituida por él.